Un servicio de la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU.
Institutos Nacionales de la Salud
Aumenta el peligroso uso de la hormona del crecimiento entre los adolescentes de EE. UU.
Muchos jóvenes están comprando productos dudosos y peligrosos en internet, advierten unos investigadores
Traducido del inglés: jueves, 24 de julio, 2014MIÉRCOLES, 23 de julio de 2014 (HealthDay News) -- Un creciente número de adolescentes de EE. UU. están usando la hormona del crecimiento humano (HCH) sintética para mejorar su musculatura y su capacidad atlética, halla un estudio reciente.
El porcentaje de adolescentes que admiten utilizar la HCH aumentó hasta el 11 por ciento en 2013, una cifra que es más del doble de la cifra de 5 por ciento en 2012, reveló la nueva encuesta de Partnership for Drug-Free Kids.
La preocupante tendencia resalta la necesidad de una regulación y una supervisión más estrictas de las sustancias para mejorar el rendimiento y otros productos de "aptitud física", planteó el grupo.
"Estos nuevos datos apuntan a una tendencia preocupante entre los adolescentes de hoy día", comentó Steve Pasierb, presidente de Partnership, en un comunicado de prensa del grupo. "Los jóvenes buscan y usan sustancias para mejorar el rendimiento como la HCH sintética y complementos que supuestamente contienen HCH con la esperanza de mejorar el rendimiento atlético o la apariencia corporal, sin saber en realidad qué sustancias están poniendo en sus cuerpos.
Otra experta se mostró de acuerdo en que los nuevos datos son preocupantes.
"El marcado aumento en el uso reportado entre los adolescentes de sustancias para mejorar el rendimiento, como los esteroides o las hormonas del crecimiento sintéticas en los últimos años exige una masiva campaña de salud pública para educarlos sobre los riesgos potenciales catastróficos, e incluso letales, de usar mal esos productos", enfatizó la Dra. Patricia Vuguin, endocrinóloga pediátrica del Centro Médico Pediátrico Cohen en New Hyde Park, Nueva York.
El cuerpo produce la hormona del crecimiento de forma natural, y hace mucho que los expertos saben que la hormona es esencial para el crecimiento y la producción celular en los jóvenes. También ayuda a regular la composición corporal, el músculo y el crecimiento óseo.
Una forma sintética de esta hormona, conocida como HCH (y como hGH en inglés), ha estado disponible desde 1985, anotó la Partnership. El Congreso aprobó ciertos usos de la HCH sintética, por ejemplo para la enfermedad de deterioro muscular asociada con el VIH/SIDA, la deficiencia en adultos debido a tumores pituitarios poco comunes y el tratamiento a largo plazo de la estatura baja en los niños.
Pero todos los demás usos de la HCH para otras afecciones médicas están estrictamente prohibidos.
Las personas que esperan mejorar sus capacidades atléticas o su apariencia han abusado de la hormona del crecimiento sintética en el pasado. Para rastrear el uso de HCH y otras sustancias para mejorar el rendimiento, los investigadores encuestaron a más de 3,700 estudiantes de secundaria. También encuestaron a 750 padres durante entrevistas en casa.
Aunque el sexo no afectó significativamente el uso de la HCH sintética, el estudio halló que la raza y la etnia sí desempeñaban un rol. Los jóvenes negros e hispanos reportaron usar la HCH sintética con unas tasas más altas que los adolescentes blancos. Los investigadores hallaron que el 15 por ciento de los adolescentes negros y el 13 por ciento de los hispanos dijeron que habían usado la sustancia al menos una vez, frente al 9 por ciento de los adolescentes blancos.
También hubo un vínculo firme entre el uso de la HCH y de esteroides, mostró el estudio. El uso de esteroides entre los adolescentes también aumentó, del 5 por ciento en 2009 al 7 por ciento en 2013.
Usar HCH sintética y otras sustancias y productos para mejorar el rendimiento plantea graves riesgos de salud, advirtieron los autores del estudio. Hay un mercado esencialmente no regulado, anotaron, para una variedad de productos que prometen mejorar la masa muscular, el rendimiento atlético y la apariencia física.
"No son productos que garanticen seguridad y eficacia", dijo Pasierb. "Los medicamentos recetados y de venta libre deben pasar por una evaluación rigurosa para probar que son seguros antes de venderse al público, pero los complementos aparecen en las tiendas sin regulación de parte de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU., y en realidad debe probarse que son inseguros antes de poder sacarlos de circulación", anotó Pasierb.
Dijo que eso "crea una percepción falsa de seguridad, haciendo que los adolescentes impresionables arriesguen su salud con productos potencialmente peligrosos que no han sido evaluados. Y aunque es dudoso que todos los adolescentes que reportaron haber usado HCH sintética en realidad obtuvieran la hormona del crecimiento humano sintética, la proliferación de productos comercialmente disponibles que se mercadean diciendo que contienen la HCH sintética, o que promueven la producción natural de la HCH dentro del cuerpo, es impactante".
Los adolescentes también están más conscientes del mercadeo en línea de esteroides y de HCH sintética que hace dos años, y son menos propensos a creer que su salud está en un riesgo significativo por usar los fármacos para mejorar el rendimiento, revelaron los investigadores.
"Dado el marco regulador actual de la industria de los complementos, y la cantidad de productos que se mercadean y venden en línea, es difícil, si no imposible, saber exactamente qué contienen esos productos que consumen los adolescentes", añadió Pasierb.
"La implicación para los padres, los profesionales de la atención médica, los legisladores y los reguladores es que esta es un área con un interés, una participación y un peligro potencial aparentemente crecientes para los adolescentes, que amerita una evaluación seria de las áreas en que los controles actuales sobre la fabricación y el mercadeo no logran prevenir el uso de esos productos en los adolescentes", explicó.
Los jóvenes que no consideran que esas sustancias sean arriesgadas son más propensos a usarlas, advirtieron los autores del estudio.
La nueva encuesta resalta "la necesidad de proteger a los jóvenes de los que los desean victimizar como objetivos fáciles de mercadeo", comentó en el comunicado de prensa de la Partnership Travis Tygart, director ejecutivo de la Agencia Antidopaje de EE. UU.
Aunque el 58 por ciento de los padres dijeron que habían hablado con sus hijos sobre los esteroides u otras sustancias para mejorar el rendimiento, el estudio reveló que apenas el 3 por ciento creen que sus hijos adolescentes han usado los productos en algún momento. Mientras tanto, apenas el 12 por ciento de los adolescentes reportaron tener una conversación con sus padres sobre fármacos que incluían la HCH sintética.
"Lo que encuentro cuando hablo con los adolescentes es la presión significativa que sienten para destacar", comentó en el comunicado de prensa Tyler Hamilton, un ex ciclista profesional y defensor antidopaje.
"Ya sea en los deportes, en la escuela, en el estatus social o en la apariencia, los adolescentes sienten que tienen que hacerlo mejor. El estudio provee una buena oportunidad para que los padres y otras figuras influyentes en sus vidas se den cuenta de a qué se enfrentan los adolescentes y refuercen un mensaje de amor y aceptación incondicionales", añadió Hamilton, quien devolvió su medalla de oro olímpica tras admitir haber usado un medicamento para mejorar el rendimiento durante toda su carrera.
Vuguin tenía sus propias teorías sobre el aumento en el uso de HCH entre los adolescentes.
"El uso de esteroides entre los chicos jóvenes, en particular los que levantan peso, se ha conocido durante años", dijo. "Pero es sorprendente y preocupante ver que los adolescentes de ambos sexos usan cada vez más las versiones sintéticas de la hormona del crecimiento humano, ostensiblemente para maximizar la masa corporal y minimizar la grasa corporal", añadió".
"Aunque es difícil precisar por qué más adolescentes podrían estar usando estas sustancias, sospecho fuertemente que la creciente 'cultura del selfie' entre los jóvenes, que usan cada vez más los medios sociales para proyectar su imagen corporal, influye sobre estas nuevas estadísticas preocupantes", apuntó Vuguin.
Además de rastrear el uso de las sustancias para mejorar el rendimiento, el estudio halló otras tendencias en el abuso de drogas entre los adolescentes, que incluían:
- Casi la mitad, o el 44 por ciento, de los adolescentes dijeron que habían usado marihuana al menos una vez en su vida. De esos adolescentes, el 41 por ciento comenzaron antes de cumplir los 15 años.
- Alrededor de uno de cada cuatro adolescentes, o el 23 por ciento, admitieron haber abusado o usado mal un medicamento recetado al menos una vez.
- El porcentaje de adolescentes que habían intentado alguna vez drogarse usando un medicamento de venta libre para la tos pasó del 12 por ciento en 2012 al 15 por ciento en 2013.
Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTES: Patricia Vuguin, M.D., pediatric endocrinologist, Cohen Children's Medical Center, New Hyde Park, N.Y.; Partnership for Drug-Free Kids, news release, July 23, 2014
HealthDay
(c) Derechos de autor 2014, HealthDay
- Más noticias de salud en:
- Hormonas
- Salud de los adolescentes
No hay comentarios:
Publicar un comentario