viernes, 25 de julio de 2014

Una técnica utilizada en algunas histerectomías podría ayudar a propagar el cáncer, según un estudio: MedlinePlus

Una técnica utilizada en algunas histerectomías podría ayudar a propagar el cáncer, según un estudio: MedlinePlus

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Una técnica utilizada en algunas histerectomías podría ayudar a propagar el cáncer, según un estudio

Cortar el útero en fragmentos más pequeños para extirparlo de forma mínimamente invasiva puede dispersar una malignidad no detectada
Traducido del inglés: miércoles, 23 de julio, 2014
Imagen de noticias HealthDay
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MARTES, 22 de julio de 2014 (HealthDay News) -- Extirpar el útero mediante un procedimiento mínimamente invasivo conocido como morcelación conlleva un riesgo de propagar un cáncer no detectado, y ahora un estudio determina las probabilidades de forma más clara.
27 de cada 10,000 mujeres que se sometieron a la técnica tenían un cáncer uterino no detectado en el momento del procedimiento, hallaron los investigadores, y las mujeres mayores de 65 años tenían las probabilidades más altas.
Los cirujanos que realizan una histerectomía mediante la morcelación utilizan un cúter eléctrico para cortar el tejido uterino en fragmentos más pequeños, y entonces sacan esos fragmentos a través de incisiones pequeñas a través del abdomen con un tubo o un laparoscopio.
"Con este procedimiento, se está desintegrando el útero", apuntó el investigador del estudio, el Dr. Jason Wright, jefe de oncología ginecológica del Colegio de Médicos y Cirujanos de la Universidad de Columbia, en la ciudad de Nueva York.
"En esencia se está cortando en el cáncer [si hay] y eso podría en teoría propagar el cáncer fuera del útero", explicó.
Ese riesgo no existe cuando el útero se extirpa entero, como en la histerectomía convencional, dijo.
Para el nuevo estudio, que aparece en línea el 22 de julio en la revista Journal of the American Medical Association, Wright evaluó los datos del seguro de más de 500 hospitales. Apuntó que las investigaciones anteriores se centraron en informes de hospitales individuales, que estimaron el riesgo en 9 a 100 por cada 10,000 mujeres que se sometieron al procedimiento.
En abril, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de EE. UU. publicó una alerta de seguridad, disuadiendo del uso de la morcelación eléctrica para la extirpación del útero o de los fibromas uterinos (unos tumores no cancerosos que pueden provocar sangrado entre periodos y dolor) debido al riesgo de cáncer.
Hay otras opciones disponibles que no conllevan la morcelación, según la FDA. La agencia sigue estudiando el procedimiento.
Cada año, en EE. UU. se realizan unas 500,000 histerectomías para problemas como el cáncer y los fibromas uterinos, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EE. UU.
Wright identificó más de 230,000 mujeres que se sometieron a una histerectomía mínimamente invasiva entre 2006 y 2012. De ellas, unas 36,000 se sometieron a la técnica de morcelación. Entre ellas, se hallaron 99 casos de cáncer uterino. Eso equivale a unas 27 mujeres por cada 10,000.
Cuanto mayor era la mujer, más probable era que tuviera un cáncer subyacente, halló el estudio. Se detectó cáncer tras la morcelación a seis mujeres menores de 40 años, y lo mismo ocurrió con 24 mujeres a partir de los 65 años, un aumento de alrededor de un 36 por ciento.
Aunque el riesgo de la morcelación se conocía, el nuevo estudio ofrece una información nueva valiosa respecto a que las mujeres mayores son las que están en el mayor riesgo, apuntó el Dr. Michael Strongin, jefe de cirugía ginecológica del Hospital Lenox Hill, en la ciudad de Nueva York.
"Creo que la moraleja importante es que mientras mayor sea la paciente que se somete a un procedimiento como la morcelación eléctrica, mayor es el potencial de encontrar malignidades no sospechadas", apuntó Strongin, quien no participó en el estudio. "En consecuencia, eso debería ser un factor tremendo cuando los médicos deciden si usar o no esa técnica en particular".
Las mujeres deben comentar las ventajas y las desventajas del procedimiento con sus médicos, planteó Wright.
Sopesar los riesgos y los beneficios es importante, dijo Strongin. "[El estudio] muestra que el riesgo relativo para las mujeres menores de 40 años es muy distinto que para las mujeres mayores de 65".

Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTES: Jason Wright, M.D., chief, gynecologic oncology, associate professor, women's health, and associate professor, obstetrics and gynecology, Columbia University College of Physicians and Surgeons, New York City; Michael Strongin, M.D., chief, gynecologic surgery, Lenox Hill Hospital, New York City; July 22, 2014, Journal of the American Medical Association, online
HealthDay
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