Un escaso conocimiento en matemáticas provoca calcular mal las dosis de tratamiento

Los padres con escasos conocimientos matemáticos y con una educación de nivel bajo son cinco veces más propensos a administrar los medicamentos de manera incorrecta a sus hijos que los que sí poseen habilidades matemáticas de un cierto nivel.

Redacción | 10/05/2012 00:00

Esta es la conclusión a la que ha llegado un estudio presentado en la reunión anual de las asociaciones de Pediatría americanas.

Análisis de habilidades

El trabajo analizó las habilidades matemáticas y de lectura de 289 padres con hijos menores de ocho años, que habían recibido un tratamiento en estado líquido en su visita a las urgencias pediátricas para compararlas con la dosis del medicamento que administraban. "Los padres afrontan retos como buscar la manera más efectiva y segura de suministrar la medicación a sus hijos", explican los investigadores.

Los progenitores realizaron tres test para que los científicos analizasen sus habilidades. Después mostraron cómo medían la medicación que les habían prescrito en el tratamiento de sus hijos. Las conclusiones del estudio mostraron que uno de cada tres tenía pocas habilidades de lectura, mientras que el 83 por ciento de los padres tenían poca pericia numérica. Asimismo, los resultados también mostraron que el 41 por ciento de los padres administraban una dosis errónea.

"Nuestro estudio ha demostrado que muchos padres tienen pocos conocimientos matemáticos y, como consecuencia, podrían cometer errores en las dosis que administran a los niños", señalan. Además, han concluido que existe la necesidad de dirigir esta falta de habilidades con estrategias que reduzcan la posibilidad de que los padres den la medicación de forma inadecuada. "Por ejemplo, mostrándoles dibujos de los instrumentos que sirven para administrar la medicación con las dosis correctas".