domingo, 15 de septiembre de 2013

La mayoría de las muertes por cáncer de mama son de mujeres más jóvenes y que no se han hecho las pruebas, según un estudio: MedlinePlus

La mayoría de las muertes por cáncer de mama son de mujeres más jóvenes y que no se han hecho las pruebas, según un estudio: MedlinePlus

 

La mayoría de las muertes por cáncer de mama son de mujeres más jóvenes y que no se han hecho las pruebas, según un estudio

Las mamografías deberían empezar a los 40 años de edad, afirma un investigador

Traducido del inglés: martes, 10 de septiembre, 2013
Imagen de noticias HealthDay
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LUNES, 9 de septiembre (HealthDay News) -- Una nueva investigación sobre el cáncer de mama revela una tasa de mortalidad significativa en las mujeres menores de 50 años que no realizaron mamografías de forma regular y plantea dudas con respecto a las directrices actuales sobre los exámenes propuestas por un comité de expertos de Estados Unidos.
Los hallazgos respaldan los logros de las mamografías realizadas con regularidad, especialmente para las mujeres más jóvenes, afirmó el investigador del estudio, el Dr. Blake Cady, profesor emérito de cirugía en la Facultad de Medicina de Harvard y en el Hospital General de Massachusetts, en Boston.
"Yo propondría que las mujeres empezaran las pruebas a los 40 años", planteó Cady. Las mujeres más jóvenes tienden a tener tumores que crecen más rápidamente y que son más agresivos, según los expertos.
Cuándo deberían empezar las mamografías y con qué frecuencia deberían repetirse ha sido una cuestión controvertida. En 2009, el Grupo de Trabajo de Servicios Preventivos de los EE.UU., un comité de expertos que ofrece recomendaciones en cuanto a las prácticas de salud, afirmó que las mujeres de 50 a 74 años de edad deberían hacerse mamografías cada dos años. Las mujeres menores de 50 años, según el comité, deberían hablar con el médico y decidir si realizan la prueba en función de los posibles beneficios, como puede ser una detección temprana, y de los posibles perjuicios, que incluyen el tratamiento excesivo y la ansiedad provocada por los resultados falsos positivos.
No obstante, la Sociedad Americana del Cáncer (American Cancer Society) y otras organizaciones han seguido recomendando que el inicio de las evaluaciones anuales sea a los 40 años para las mujeres con un riesgo promedio. Más de 40,000 mujeres fallecen cada año de cáncer de mama en Estados Unidos.
Para el nuevo estudio, publicado en línea el 9 de septiembre Cancer, los investigadores evaluaron más de 600 casos de muertes por cáncer de mama, observando los registros de las mamografías y otros detalles.
El 71 por ciento de las muertes fueron de mujeres que no se habían hecho ninguna prueba, la mayoría de las cuales eran más jóvenes, descubrió Cady. La mitad de todas las muertes de cáncer de mama fueron de mujeres menores de 50 años, mientras que solo el 13 por ciento de las mujeres que fallecieron de cáncer de mama tenían 70 años o más.
Para realizar el estudio, Cady y sus colaboradores examinaron los casos de cáncer de mama invasivo a partir de los diagnósticos, entre 1990 y 1999, hasta 2007. Las pacientes fueron tratadas en los hospitales de Partners HealthCare en Boston. Los investigadores tenían acceso a los informes sobre el uso de mamografías, de las cirugías y las patologías, y a las fechas de los fallecimientos.
El equipo de Cady usó una técnica llamada "análisis de fallos", con la que los científicos miran atrás para observar qué es lo que podría haber salido mal. "Es lo contrario a un ensayo aleatorio, que empieza en un momento dado y realiza un seguimiento a las personas hasta el final del estudio", afirmó Cady. "Nosotros seguimos a las personas que han fallecido y vamos hacia atrás hasta el primer diagnóstico y averiguamos los detalles".
Se consideró que las mujeres no habían realizado ninguna prueba si nunca se habían hecho una mamografía o si habían pasado más de dos años desde su última mamografía.
Los hallazgos confirmaron los beneficios de la evaluación más temprana, afirmaron algunos expertos.
"[El estudio] presenta un argumento muy convincente a favor del inicio de las pruebas realizadas una vez al año a partir de los 40 años", afirmó la Dra. Barbara Monsees, presidenta de la Comisión de Imágenes del Seno del Colegio Americano de Radiología, que no participó en la investigación. "Corrobora lo que sabemos desde hace mucho tiempo".
En general, el estudio también mostró un aumento en la supervivencia al cáncer de mama que coincidía con el aumento de las mamografías. La mitad de las mujeres diagnosticadas de cáncer de mama en 1969 murieron a lo largo de los 13 años posteriores al diagnóstico, en comparación con aproximadamente el 9 por ciento de las diagnosticadas entre 1990 y 1999 que fueron incluidas en este estudio.
Aunque algunos expertos creen que la reducción de la tasa de mortalidad por cáncer de mama se debe a la mejora de los tratamientos, el estudio muestra que eso no es todo, afirmó Monsees. "Este documento muestra que la reducción se debe principalmente a una detección más temprana y a unas pruebas mejores", señaló.
Las pruebas realizadas con cierta frecuencia son incluso más importantes para las mujeres más jóvenes que para las mayores, añadió. Los tumores en las mujeres mayores normalmente crecen más lentamente que los de las mujeres más jóvenes.
La moraleja: "Realizar la prueba no reduce el riesgo de padecer cáncer de mama, pero sí reduce el riesgo de morir por ello", aseguró Monsees.
Robert Smith, director de pruebas de la Sociedad Americana del Cáncer, aportó este punto de vista: "Realizar pruebas de forma regular se asoció con una probabilidad mucho, mucho más baja de morir [de cáncer de mama]", en comparación con no realizar ninguna prueba o hacerla cada mucho tiempo.
Un tercio de las muertes de las mujeres que sí realizaron las pruebas con regularidad se atribuyeron a los "cánceres de intervalo", aquellos que son detectados entre las mamografías realizadas cada dos años. Aunque esto muestra que realizar mamografías de forma regular no elimina completamente el riesgo de morir de cáncer de mama, comentó Smith, "el mensaje aquí es que la mamografía es una buena parte del plan de prevención".
Si el cáncer se detecta temprano, las opciones de realizar una operación quirúrgica en la que se conserva el pecho son mayores y el riesgo de morir de cáncer se reduce, afirmó.

Artículo por HealthDay, traducido por Hispanicare
FUENTES: Blake Cady, M.D., professor emeritus, surgery, Harvard Medical School, Boston; Robert Smith, Ph.D., screening director, American Cancer Society; Barbara Monsees, M.D., chairwoman, American College of Radiology Breast Imaging Commission, and Ronald and Hanna Evens Professor of Women's Health and Radiology, Washington University Medical Center, St. Louis; Sept. 9, 2013, Cancer, online
HealthDay
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