jueves, 23 de junio de 2011

Inhibir las células iniciadoras, objetivo frente al glioblastoma - DiarioMedico.com

Diariomedico.com
ESPAÑA
eSPERANZA DE VIDA de 15 MESES
Inhibir las células iniciadoras, objetivo frente al glioblastoma
Durante la última década los investigadores se han centrado en descifrar el mecanismo molecular implicado en el origen y desarrollo del glioblastoma. Así lo ha comentado Ángel Ayuso, del Laboratorio de Morfología Celular del Centro de Investigación Príncipe Felipe, de Valencia
.


Enrique Mezquita Valencia | 23/06/2011 00:00


Ángel Ayuso en el encuentro digital con los usuarios de Diario Médico.


Aproximadamente la mitad de todos los tumores cerebrales diagnosticados son glioblastomas multiformes (GBM), el tipo de tumor cerebral más común y agresivo que se conoce: la incidencia en España es de 4-6 casos por 100.000 habitantes y se diagnostican 4.000 casos nuevos cada año. En este escenario, según ha destacado Ángel Ayuso, del Laboratorio de Morfología Celular del Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) de Valencia y coordinador del comité organizador y científico del II Simposio Fundación Seve Ballesteros-Simposio Internacional de investigación básica y clínica en glioblastoma, celebrado en Valencia, es necesario reforzar una investigación básica y clínica coordinada para mejorar la situación de los pacientes diagnosticados, que se resume en que "su esperanza de vida media está en torno a los 15 meses, independientemente del tratamiento: cirugía, quimioterapia sola o combinada con radioterapia".

No obstante, en el encuentro, organizado por la Red Española de Investigación en Glioblastoma en colaboración con la Fundación Seve Ballesteros y la Cátedra Santiago Grisolía, adscrita a la Fundación Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia, los especialistas han comentado los motivos y avances para la esperanza. En este sentido, durante la última década los investigadores se han centrado en descifrar el mecanismo molecular implicado en el origen y desarrollo del GBM. Gracias a esta labor, se ha descubierto que parece albergar dentro de la masa tumoral poblaciones de células pequeñas con la capacidad de iniciar y sostener el crecimiento de tumores, las conocidas como células madre tumorales o células iniciadoras de tumores (CIT).

Entre las estrategias para inhibir las células madre tumorales iniciadoras del glioblastoma, se ensaya con virus oncolíticos y con posibles vacunas

Según Ayuso, "estas células son las responsables del inicio y mantenimiento del tumor y, por ello, a nivel básico, estamos buscando inhibidores que pueden evitar o paralizar su crecimiento". Ha remarcado que, "aunque actualmente hay varias dianas en cartera, tendrá que pasar un largo periodo de tiempo y las distintas fases de ensayos clínicos para valorar su eficacia y seguridad".

Además, existen otras líneas de investigación abiertas encaminadas a ofrecer nuevas soluciones y a ampliar el conocimiento sobre este tipo de tumores cerebrales. Estas aproximaciones se centran en vías moleculares, el uso potencial de virus oncolíticos y la utilización de vacunas para su tratamiento, entre otras.

Una característica de estos tumores es que producen factores capaces de atraer a otras células madre, entre ellas las mesenquimales

Ayuso ha reconocido que una de las principales complicaciones de este tumor es su capacidad de recidiva. "La cirugía tiene unos límites y, aunque puedes extirpar todo lo que ves, siempre queda algo, que suelen ser células dispersas por el parénquima cerebral y que, además de ser imposibles de ver, son las responsables de esa recidiva. Por otra parte, las técnicas de radioterapia no suelen ser eficaces contra esas células dispersas, ya que éstas proliferan poco, mientras que la radioterapia funciona mejor con las que proliferan mucho". Por ello, ha insistido en que los avances van encaminados a un gran objetivo: destruir todas las células madre tumorales del GMB.

El investigador ha destacado que una de las particularidades de estos tumores es que "producen una serie de factores capaces de atraer a otras células madre, entre ellas las mesenquimales". En la práctica, "algunos grupos están empezando a emplear esa particularidad para, introduciendo genes suicidas en esas células mesenquimales, actuar sobre el tumor", aunque ha reconocido que estos estudios son iniciales y que podrían pasar muchos años para una aplicación práctica. A modo de ejemplo, ha destacado el trabajo de Alfredo Quiñones-Hinojosa, del Departamento de Neurocirugía del Hospital Johns Hopkins, en Baltimore.

Mensenquimales

Quiñones está desarrollando numerosos esfuerzos de investigación en dilucidar tanto el papel de las células madre en el origen de los tumores cerebrales como el que pueden desempeñar en la lucha contra el cáncer cerebral y recuperar la función neurológica. De hecho, su equipo ha centrado parte de sus ensayos en la posibilidad de utilizar células madre mesenquimales en el tratamiento del glioblastoma y, por ello, trabajan en el desarrollo de una estrategia novedosa para glioblastoma utilizando la capacidad de BMP4 de inhibir el crecimiento de células madre tumorales, reducir la formación de tumores en vivo y disminuir los restos de tumor, al mismo tiempo que aumenta la supervivencia. Para ello, trabajan en varios mecanismos para transportar dicho gen al interior del tumor, donde va a llevar a cabo su efecto citotóxico, además de modificar células madre mesenquimales para que produzcan BMP4 en respuesta a sustancias secretadas por las células del tumor. De forma alternativa, han desarrollado un sistema basado en nanopartículas para conducir a BMP4 al interior del tumor. Ambas vías combatirían las células de glioblastoma y las células madre tumorales con elevada eficiencia, sin prácticamente afectar a las células sanas. El sistema de nanopartículas de polímeros y ADN permanece estable durante tres meses y podría ser inoculado directamente en el tumor.

Inhibir las células iniciadoras, objetivo frente al glioblastoma - DiarioMedico.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario