La mitad de los pacientes abandona el tratamiento de la depresión antes de los 6 meses recomendados
Madrid (21/11/2012) - Redacción
La OMC y Lilly han editado la "Guía de Buena Práctica Clínica en Psicoeducación en pacientes con depresión" para ayudar a los médicos de AP en su labor educativa
Cerca del 30 por ciento de los pacientes con depresión abandona el tratamiento durante el primer mes y hasta un 50 por ciento a los 3 meses. Este abandono precoz comporta una serie de consecuencias perjudiciales como son el riesgo de evolución crónica del trastorno, el aumento de posibles recaídas, así como el deterioro de la funcionalidad y calidad de vida del paciente. Por este motivo, es fundamental que el médico de Atención Primaria sea capaz de educar al paciente en su enfermedad, que sepa explicarle de forma clara y sencilla los aspectos clave de su enfermedad, y de responsabilizarle de su propio tratamiento, explicándole los efectos positivos de cumplirlo, así como los riesgos de dejarlo.
Para evitar el número de recaídas, los expertos afirman que, además de mantener el tratamiento farmacológico en todos los pacientes, al menos durante 6 meses tras la remisión del episodio depresivo, la psicoeducación es eficaz y un fuerte protector frente al desarrollo de la depresión.
Los pacientes depresivos son muy heterogéneos, con distintas motivaciones y capacidad para entender y aceptar la enfermedad, apuntan los expertos. Además, el médico no puede olvidarse de implicar a la familia del paciente, no sólo porque se ve afectada por el trastorno que sufre uno de sus miembros, sino porque que es un agente altamente influyente en su recuperación. Por ello, y con el fin de colaborar en la labor psicoeducativa de los médicos de Atención Primaria, la Organización Médica Colegial de España (OMC) y Lilly han presentado la "Guía de Buena Práctica Clínica en Psicoeducación en pacientes con depresión", una 'hoja de ruta' para ayudar al profesional a guiar al paciente y a su familia en el proceso de curación.
El contenido, avalado por el Ministerio de Sanidad, ha sido elaborado a partir de la experiencia de cuatro profesionales de la salud. El material docente para los profesionales va acompañado de cuatro materiales didácticos para los pacientes y sus familiares, que se corresponden con cada uno de los módulos que estructuran la Guía: enfermedad, tratamiento, autocuidado y familia.
Reducir las cifras de abandono es, sin duda, uno de los grandes retos para los profesionales que tratan a pacientes con trastornos depresivos. Según el Dr. Cardoner, "la mayoría de pacientes responden al tratamiento con antidepresivos a las 6-8 semanas, pero sólo un 30-40 por ciento logra la remisión en este tiempo. Sin embargo, si se éste se prolonga, hasta un 70 por ciento de los pacientes alcanza la remisión. De ahí la importancia de seguir con el tratamiento y ensayar nuevas opciones terapéuticas, si no se consiguen lo resultados deseados a la primera. Transmitir esta idea es importante para evitar que el paciente se desmoralice, reduciendo así el riesgo de abandono".
Asimismo, otro de los retos es conseguir que el paciente recupere la autoestima. Para ello, el médico debe enseñar al paciente a identificar sus emociones, a controlar los pensamientos negativos y a manejarse en el día a día, planteándole retos modestos y asequibles. "Pactar con el paciente una hora para levantarse de la cama; obligarle a ducharse y vestirse cada día, salir de casa aunque sólo sea a buscar el pan o dar la vuelta a la manzana, y realizar al menos 3 comidas al día, son algunos objetivos que puede plantear el médico", apunta el Dr. Francesc Colom, de la Unidad de Psicoeducación y Área de Tratamiento Psicológico de una Unidad de Trastorno Bipolar del Hospital Clínic de Barcelona.
Por otro lado, los especialistas señalan que es importante no dar por supuesto que la familia del paciente entiende en qué consiste esta enfermedad. Existen muchas falsas creencias en torno a la depresión que motivan actitudes erróneas hacia ella.
Para evitar el número de recaídas, los expertos afirman que, además de mantener el tratamiento farmacológico en todos los pacientes, al menos durante 6 meses tras la remisión del episodio depresivo, la psicoeducación es eficaz y un fuerte protector frente al desarrollo de la depresión.
Los pacientes depresivos son muy heterogéneos, con distintas motivaciones y capacidad para entender y aceptar la enfermedad, apuntan los expertos. Además, el médico no puede olvidarse de implicar a la familia del paciente, no sólo porque se ve afectada por el trastorno que sufre uno de sus miembros, sino porque que es un agente altamente influyente en su recuperación. Por ello, y con el fin de colaborar en la labor psicoeducativa de los médicos de Atención Primaria, la Organización Médica Colegial de España (OMC) y Lilly han presentado la "Guía de Buena Práctica Clínica en Psicoeducación en pacientes con depresión", una 'hoja de ruta' para ayudar al profesional a guiar al paciente y a su familia en el proceso de curación.
El contenido, avalado por el Ministerio de Sanidad, ha sido elaborado a partir de la experiencia de cuatro profesionales de la salud. El material docente para los profesionales va acompañado de cuatro materiales didácticos para los pacientes y sus familiares, que se corresponden con cada uno de los módulos que estructuran la Guía: enfermedad, tratamiento, autocuidado y familia.
Reducir las cifras de abandono es, sin duda, uno de los grandes retos para los profesionales que tratan a pacientes con trastornos depresivos. Según el Dr. Cardoner, "la mayoría de pacientes responden al tratamiento con antidepresivos a las 6-8 semanas, pero sólo un 30-40 por ciento logra la remisión en este tiempo. Sin embargo, si se éste se prolonga, hasta un 70 por ciento de los pacientes alcanza la remisión. De ahí la importancia de seguir con el tratamiento y ensayar nuevas opciones terapéuticas, si no se consiguen lo resultados deseados a la primera. Transmitir esta idea es importante para evitar que el paciente se desmoralice, reduciendo así el riesgo de abandono".
Asimismo, otro de los retos es conseguir que el paciente recupere la autoestima. Para ello, el médico debe enseñar al paciente a identificar sus emociones, a controlar los pensamientos negativos y a manejarse en el día a día, planteándole retos modestos y asequibles. "Pactar con el paciente una hora para levantarse de la cama; obligarle a ducharse y vestirse cada día, salir de casa aunque sólo sea a buscar el pan o dar la vuelta a la manzana, y realizar al menos 3 comidas al día, son algunos objetivos que puede plantear el médico", apunta el Dr. Francesc Colom, de la Unidad de Psicoeducación y Área de Tratamiento Psicológico de una Unidad de Trastorno Bipolar del Hospital Clínic de Barcelona.
Por otro lado, los especialistas señalan que es importante no dar por supuesto que la familia del paciente entiende en qué consiste esta enfermedad. Existen muchas falsas creencias en torno a la depresión que motivan actitudes erróneas hacia ella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario