Así se erradica una enfermedad | Mundo | elmundo.es

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ÁFRICA | Se ensaya un nuevo medicamento

Así se erradica una enfermedad

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Un afectado por la enfermedad. | Vídeo: Raquel Villaécija | Alberto Rojas

• MSF está acabando con la enfermedad del sueño en República Centroafricana
• En 2006 había un 3% de afectados; ahora, está por debajo del 0,5%
• Gracias a los avances, han sobrevivido 150 enfermos tratados recientemente
• Con un pinchazo se detecta la enfermedad y se ensaya un nuevo medicamento

Raquel Villaécija | Alberto Rojas | Batanfago (República Centroafricana)

Actualizado domingo 25/11/2012 11:57 horas

 

Hace años, en España hacían estragos el sarampión, la polio o las paperas, pero los avances científicos y la vacunación masiva convirtieron estos males en virus de museo. Otros lugares en el mundo, mucho más atrasados en el campo científico, mantienen un pulso titánico contra trastornos que, en el primer mundo, ya estarían en los libros de Historia. EL MUNDO viaja junto a Médicos sin Fronteras a Batangafo, República Centroafricana, para comprobar cómo se lucha contra la tripanosomiasis africana, más conocida como enfermedad del sueño.

Barthelemy pelea por mantener a raya los párpados. La lucha dura apenas unos segundos y no es él, sino Morfeo, el que sale vencedor. Tiene 17 años y sus intentos por batir el sueño son sólo una parte de una batalla mucho más difícil, pues desde desde que le picó la mosca tsé-tsé su estado se ha deteriorado tanto que apenas puede moverse.

Aunque hace años habría muerto, en unas semanas Barthelemy se curará, gracias a los avances médicos en materia de diagnóstico y tratamiento realizados por el equipo español de Médicos sin Fronteras (MSF) en la zona, antes uno de los focos más activos de la enfermedad del sueño. "En 2006 había un 3% de afectados. Ahora el porcentaje está por debajo del 0,5%", explica Rodrigue Nganaboy, responsable del programa de lucha contra el trastorno de MSF en el citado centro.

Su nombre técnico es tripanosomiasis africana y se da sólo en el continente negro. República Centroafricana es el país con más afectados, tras República Democrática del Congo. La mosca que transmite el mal encuentra en estos países el clima húmedo y cálido que necesita para sobrevivir. "El insecto es como un vampiro, que trabaja cuando hay más movimiento, y utiliza la noche para descansar", explica Nganaboy.

 

Síntomas

No es una leyenda que los que sufren la picadura de la mosca mueren de sueño. Antes era verdad. Los afortunados que conseguían ser tratados a tiempo tenían un 50% de posibilidades de fallecer debido a la toxicidad del antiguo tratamiento.

Gracias a los avances, los 150 enfermos tratados recientemente han sobrevivido. "Hace años no había sistema de diagnóstico y los pacientes morían por las reacciones al tratamiento", dice Silvia Barro, la jefa médico del hospital de Batangafo.

Aunque es el síntoma más llamativo, la somnolencia es sólo una de las señales de alarma. Los afectados duermen de día y se desvelan de noche, tienen problemas en el habla y apatía, sufren irritabilidad, convulsiones, vómitos, problemas de comportamiento (el parásito ataca al cerebro) e impotencia sexual.

Antes llenos de somnolientos, los pasillos del área dedicada al tratamiento de este trastorno están ahora casi desiertos. Barthelemy es uno de los pocos enfermos de la mosca tsé tsé que quedan. Junto con Marcel, que acudió al centro "decaído, abatido, y no tenía ganas de hacer nada", explica su enfermero.

 

Avances

También a Gaston, compañero de habitación, la mosca le dejó noqueado. Cuando este afectado de 52 años llegó al hospital tenía dificultades hasta para moverse. "Se encontraba en el segundo estadio de la enfermedad, con el parásito instalado ya en su cerebro", cuenta su responsable médico.

En estos seis años, MSF ha trabajado en dos ejes: el tratamiento y el diagnóstico. Antes detectar la enfermedad era un proceso farragoso. Ahora basta con un pinchazo. Se ha avanzado mucho en investigación científica para la búsqueda de un test rápido para la 'tripano' y se ensaya un medicamento nuevo para tratar la enfermedad. Este remedio será vía oral, con menos efectos secundarios que el actual.

Ahora el tratamiento se realiza en dos fases. Para los enfermos que están en la primera etapa de la enfermedad, con el parásito en la sangre pero sin tocar el cerebro, se les ofrece tratamiento ambulatorio. Para la segunda fase se suministra una inyección durante siete días, que es lo que hacen con Barthelemy o Marcel.

 

Sensibilización

Aunque la investigación en el diagnóstico, el uso de mosquiteras y la búsqueda de nuevos tratamientos ha ayudado a disminuir el número de enfermos, también ha influido mucho los llamados 'despistajes' o consultas ambulantes en las que los profesionales rastrean pueblo por pueblo en busca de enfermos.

"La sensibilización en estos casos es fundamental, pues son los propios afectados los que deben acudir al centro en cuanto sospechen que pueden estar infectados", dice Aurora Revuelta, del equipo de MSF en la capital centroafricana. Gracias a esta movilización, estas campañas preventivas llegan a alrededor de 20.000 personas.

Cae la noche en el hospital de bandera española. Mientras la mayoría de enfermos descansa, Barthelemy, dormido de día, ahora se desvela. Según el encargado de pincharle, en unos días podrá hablar y recuperar parte de la movilidad perdida».