sábado, 14 de mayo de 2011

La vacuna de Patarroyo, con 42 productos sintéticos de malaria - DiarioMedico.com

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ESPAÑA
COLFAVAC SE ENSAYARÁ EN HUMANOS A PARTIR DEL AÑO 2012
La vacuna de Patarroyo, con 42 productos sintéticos de malaria
Tras obtener un 90 por ciento de efectividad en monos Aotos, la vacuna sintética para la malaria de Manuel Patarroyo se ensayará en humanos. El investigador ha hablado con Diario Médico sobre la vacuna, que tiene 42 componentes de la malaria sin productos biológicos.


Pilar Laguna - Jueves, 12 de Mayo de 2011 - Actualizado a las 00:00h.


La nueva vacuna sintética para la malaria desarrollada por el grupo de investigación de Manuel Elkin Patarroyo se ensayará en humanos, después de obtener un 90 por ciento de efectividad en monos Aotos. El grupo investigador anunciará hoy en Bogotá los resultados de Colfavac, una vacuna que tiene 42 componentes de la malaria sin productos biológicos, obtenida en su laboratorio tras sintetizar 38.000 moléculas e identificar los fragmentos críticos del parásito que se adhieren a los glóbulos rojos para infectarlos.

"Lo que hemos hallado es una metodología lógica racional para el desarrollo de vacunas. Conocemos 517 enfermedades para las que sólo hay 15 vacunas disponibles, lo que significa que tenemos sin hacer el 97 por ciento de los deberes", explica Patarroyo. Lo difundido en las últimas semanas como "vacuna universal" consiste en unos principios estructurales e inmunológicos para lograr vacunas sintéticas multiantigénicas y multifásicas -tal como se publica en Chemical Review-, en las que por primera vez se usan átomos del microbio.

Pero el inmunólogo advierte de que para universalizar la vacuna habrá que reconocer todos los péptidos implicados según los rasgos genéticos de cada raza o país. Ha adelantado algunos pormenores de los últimos estudios durante una conferencia celebrada en la Fundación de Estudios Médicos de Molina de Segura (Murcia). Allí ha insistido en que "la protección contra la malaria significa ausencia total del parásito, aunque haya estudios que digan que puede haber 2.500 parásitos por microlitro después de la vacunación" y que Colfavac (Colombian Falciparum Vaccine) lo consigue con 42 átomos sintéticos.

Según Patarroyo, las características propias de la malaria la convierten en una enfermedad modélica. Se desarrolla con patrones de enfermedad aguda, tiene fácil diagnóstico y se cura con tratamiento. Además, cuenta con un modelo de experimentación propio, el mono Aotus del Amazonas, capaz de desarrollar malaria igual que los humanos.

El primer paso decisivo para establecer el nuevo sistema de desarrollar vacunas se debe a Mauricio Calvo, discípulo de Patarroyo, que quiso saber qué fragmentos de moléculas utilizaba el Plasmodium falciparum para adherirse al glóbulo rojo: "Eso modificó por completo la parte conceptual de nuestro trabajo. Las vacunas completas se basan en el cuerpo entero del parásito, pero las nuestras sólo utilizan péptidos de unión de alta actividad (HABP, en sus siglas en inglés) que infectan los glóbulos rojos".

Cuando en 2002 se publicó el genoma total del parásito de la malaria, y un año después otro trabajo internacional identificaba 50 extremidades en su estructura, el grupo colombiano llevaban ya 48 reconocidas. Pero durante siete años de experimentos combinando los HABP no lograron la respuesta inmunológica adecuada. "Nos habíamos convertido en buscadores de manos, y por el desaliento estuvimos a punto de admitir que las vacunas sintéticas no servían puesto que fracasamos en todos los intentos de inmunizar a los monos".

El siguiente paso tiene que ver con los residuos de unión críticos (CBR), o aminoácidos críticos, que son los fragmentos mínimos que infectan la célula a los 40 segundos de adherirse si no hay respuesta inmunológica. Patarroyo cambió algunos de los aminoácidos e invirtió su polaridad para modificar dicha respuesta. Fue entonces cuando en su laboratorio se leyeron 10.000 glóbulos rojos diarios y se sintetizaron 38.000 moléculas, de las que 4.000 se ensayaron en los Aotus. "El reemplazo es sencillo, pero tiene que hacerse con volumen, masa y superficie idénticos a los fragmentos sustituidos". Con este esquema se sustituirían en sentido inverso alanina y serina, fenilalanina y argininina, prolina y aspártico, leucina e histidina, isoleucina y asparagina, por citar algunos de los componentes. El investigador afirma que ya se han sintetizado las 58 proteínas que el parásito de la malaria usa para invadir el glóbulo rojo.



Personalidad desbordante

Manuel Elkin Patarroyo es un investigador controvertido, más por lo que dice que por lo que hace. No se encuentran detractores de su calidad científica, pero sí de la forma mediática de comunicar los resultados de sus publicaciones, que justifica por la necesidad de conseguir fondos para seguir investigando -"los dirigentes no leen el Nature o el Chemical Reviews", aduce en su descargo-. Tampoco gustan su declarada independencia de la industria farmacéutica -"quisieron producir una vacuna que costaba 10 céntimos con el coste final de 50 euros"- o las críticas abiertas a la OMS tras haberle cedido la patente de la primera vacuna antimalárica, y más tarde por la actuación durante la gripe H1N1. Hay quien detesta su protagonismo y desbordante sociabilidad, y quien adora su exquisito sentido del humor. Patarroyo es la cara pública de cincuenta investigadores de las áreas de inmunología, biología molecular, biocatálisis, síntesis de péptidos, receptor ligando, RMN, virología, inmunoquímica, matemáticas y de la estación de primates para experimentación, que desarrollan su trabajo en la Fidic de Colombia.
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